Souslestreilles SébastiencottereauDe influencias varias, la cocina de la bahía de Arcachon se inspira en los recursos de la tierra y del mar. Auténtica y tradicional, muy ligada al espíritu festivo y a la convivialidad, es heredera de una tierra generosa y un buen hacer único. Esta deliciosa gastronomía regional nos ha sido legada por generaciones de marineros pescadores, campesinos y pastores que se han sucedido hasta nuestros días.
Mg 4368De visita en Arcachon, descubre su gran variedad de productos de la tierra y sus ricos sabores.
En lo que respecta al mar, con 80 km de litoral en el golfo de Vizcaya, los restaurantes cultivan la calidad y el sabor gracias a productos locales traídos directamente del Atlántico. Aunque hay una gran variedad de pescado y marisco, la estrella por excelencia de la bahía de Arcachon es la ostra. ¿Lo más de lo más? ¡Una degustación de ostras en una cabaña ostrícola con los pies en la arena!
Couple Fruits De Mer @conteursEn lo que respecta a la tierra, te sorprenderá la cantidad de especialidades culinarias que ofrece la bahía de Arcachon. Basta con darse una vuelta por la Halle Baltard del mercado de Arcachon para darse cuenta de la sutileza, la riqueza y la diversidad de los sabores landeses y sucumbir a la tentación. Arcachon está repleto de restaurantes tradicionales, la mayoría muy típicos, que conviven perfectamente con pizzerías, restaurantes chinos, japoneses o exóticos ¡para satisfacer los antojos de nuestro paladar en cada momento!
¡Atención, amantes del vino! Los viñedos de las Landas –le Tursan, la Chalosse, Bas-Armagnac, Médoc y Burdeos– no quedan muy lejos y te sorprenderán con vinos de excepcionales colores y aromas. Puedes probarlos en los bares de vinos, las tiendas de vinos y los restaurantes de la bahía de Arcachon.
Para ir abriendo boca, puedes probar nuestras especialidades más sabrosas en los mercados, en nuestras pastelerías, en nuestros restaurantes o en una fiesta de pueblo.
Takedahrs
Photomix Company
RitaeSus aromas irán en tu busca… déjate guiar por el olfato y la curiosidad ¡en cualquier estación!
